sábado, 7 de marzo de 2015

DESPOLVOREÁNDOSE


Despertó asustada. Algo pasó la noche anterior que no recordaba bien. Las imágenes eran difusas y las caras no se mostraban reconocibles en sus recuerdos pero sí la sensación de haber pasado una noche de ensueño. Recordaba bailes, besos, caricias. Recordaba un juego entre dos.

Recordaba sentirse princesa de un cuento con príncipe azul incluido.

A pesar de ello, despertó asustada.

Quiso levantarse pero la cabeza le daba cien mil vueltas. Era un mareo distinto a los que previamente había tenido. No era resaca de alcohol, ni cansancio por demasiado trabajo…

Al girarse para ver su despertador vio que, al lado de la mesita de noche, había un zapato y sólo uno. Era de tacón alto marrón y rosa con un precioso broche a juego. Recordaba haberlo puesto el día anterior.

Y sonó en ese preciso instante el sonido de un mensaje en el móvil. Lo activó y pudo leer:

SE BUSCA A LA PRINCESA QUE LLEVABA LA PAREJA DE ESTE ZAPATO. 
TE RECOMPENSARÉ CON UNA VIDA DE CUENTO.
;)

Entonces ella se fue a la cocina, se preparó su café, se sentó en la mesa y acompañó su desayuno con un delicioso zapato de tacón alto con lacito rosa. 

Buen provecho.



domingo, 1 de marzo de 2015

TEU NOME POR MAR E TERRA. A cada canto.





Quero cravar o teu nome
cunha navalla de lúa 
nos outos muros da noite.

Nun pano cor de limón 
pon o teu nome e no mar 
ízao no mastro maior.

Vou escribilo na area 
có tinteiro de alborada 
pra que o vexan as sereas.

Se o teu nome naufragase 
ían saber a vainilla 
as augas dos sete mares.

Con branco fío de escuma
vouno bordar na bandeira 
dunha nao que sae pra Cuba.

Pra Cuba non, meu amor, 
quero que vaia o meu nome 
prá illa de Curaçao.

Se o teu nome naufragase 
ían saber a vainilla 
as augas dos sete mares.

Prá illa de Curaçao.